lunes, 24 de junio de 2013

El exceso de Alcohol aumenta la probabilidad de padecer Demencias en los Adultos Mayores

Los adultos mayores que toman mucho alcohol tienen un riesgo elevado de desarrollar declive cognitivo y demencias, como la enfermedad de Alzheimer y el mal de Parkinson.
Los investigadores de la Universidad de Exeter (Reino Unido) consideran que su estudio debería "generar consciencia en los adultos mayores y sus doctores de que tomar mucho alcohol aumenta su riesgo de experimentar declive cognitivo. A su vez, nuestros resultados deberían fomentar cambios en las conductas en torno al alcohol".
Más alcohol, menos memoria
El epidemiólogo Iain Lang, especialista a cargo del estudio, explica que se sabe de antemano los daños que el alcohol genera en el sistema cardiovascular pero se investigó muy poco su asociación con el declive cognitivo y las demencias. Por ese motivo realizaron un estudio con 5.075 personas de 65 años y siguieron su salud de cerca durante 8 años.
Los especialistas registraron cuanto alcohol consumían los participantes y les realizaron regularmente pruebas para medir sus funciones cognitivas y la memoria. Consideraron que un voluntario tomaba mucho cuando bebía 4 o 5 tragos de una vez. Lang observó que el 8,3% de los hombres y 1,5% de las mujeres bebían mucho alcohol.
Los hombres y mujeres que tomaban mucho al menos una vez al mes tenían un riesgo 62% mayor de estar en el 10% de los voluntarios que experimentaron un mayor declive cognitivo y en el 27% de los participantes que sufrieron la mayor pérdida de memoria.
"Los participantes que tomaban mucho al menos dos veces al mes mostraron un riesgo doblemente mayor de sufrir declive cognitivo y pérdida de memoria", afirma Lang.
 

Alzheimer es la demencia más común en la Población Adulta Mayor

La enfermedad del Alzheimer (EA) es la demencia más frecuente entre los adultos mayores limeños. Así lo reveló un reciente estudio publicado en la revista “Anales”, de la Facultad de Medicina, de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.

Para llegar a esta conclusión, el equipo de investigadores peruanos evaluó a un total de 1.532 pacientes mayores de 65 años. De todos ellos, el 6,85% presentó algún tipo de demencia, siendo el mal de Alzheimer el diagnóstico más común, con un 56,3 % de frecuencia.

En esta investigación también se confirmó que la prevalencia de demencia fue significativamente alta en mujeres, debido a que durante el período posmenopáusico la reducción abrupta de hormonas sexuales (estrógenos y progestágenos) incrementaría el riesgo de sufrir la EA.

Los investigadores señalan evidencias que asocian la EA con factores de riesgo cardiovasculares como la diabetes, hipertensión arterial, el tabaquismo y la hipercolesterolemia. Por ello, recomiendan una dieta saludable y el consumo de ácidos grasos poli-insaturados que reducen la acumulación de colesterol en las arterias.
Asimismo, realizar actividades físicas diarias como caminatas de 30 minutos. Además, controlarse la diabetes y la hipertensión arterial, dejar de fumar y vivir sin mucho estrés.
 

EsSalud estima que el 50% de adultos mayores en el Perú sufre algún tipo de abuso por parte de sus familiares

El 50% de adultos mayores en el Perú sufre algún tipo de maltrato por parte de sus familiares, en especial la intolerancia y la indiferencia, estimó EsSalud, al celebrarse el Día Mundial de la Toma de Conciencia contra el Maltrato al Adulto Mayor.
Ligia Castillo Tapia, gerontóloga y asistenta social de esa institución, indicó que entre otras agresiones contra dicho segmento poblacional figuran los insultos, así como las ofensas físicas y sexuales, e incluso es común que sus hijos u otros parientes se apoderen de sus pensiones.
No obstante, resaltó que en el país existe legislación orientada a la defensa y protección de las personas de la tercera edad, como la Ley 28803, que garantiza los derechos de los ancianos y determina que sus familias tienen la obligación de velar por ellos en pro de su bienestar.
La especialista, quien también dirige el Centro del Adulto Mayor de San Borja, consideró, sin embargo, que en el Perú aún falta tomar conciencia sobre la importancia que los ancianos tienen en la vida familiar y social del país.
Según indicó, las zonas donde existe mayor cantidad de maltrato hacia los adultos mayores son los distritos de Lima Norte y Lima Sur, pero también hay casos de abusos reportados en la sierra del país, los cuales no son denunciados por un tema de ignorancia de las víctimas.
Fuente: Andina

Ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables alienta a la población a no maltratar a los Adultos Mayores

La ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), Ana Jara Velásquez, exhortó a la población peruana a brindar un buen trato a los adultos mayores, que ascienden a unos 2.8 millones en el Perú.
En el marco de la celebración del Día mundial de toma de conciencia de no al maltrato al adulto mayor, la funcionaria destacó que su portafolio ha iniciado una campaña de buen trato a las personas de la tercera edad.
Ante más de mil adultos mayores congregados en el parque Butters, de Barranco, indicó que esta campaña comprende diversas actividades a nivel familiar, institucional y social.
Resaltó que el MIMP, conjuntamente con entidades públicas y privadas, desarrolla acciones enfocadas en el respeto, la solidaridad, el reconocimiento y la atención oportuna a las personas adultas mayores.
Asimismo, Jara resaltó la ejecución del programa nacional Vida Digna, que se inició en la capital, y ahora se expande a cuatro regiones del país, para atender a la población adulta mayor en situación de abandono en las calles.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), en el Perú hay dos millones 711 mil 772 habitantes mayores de 60 años, los que representan, aproximadamente, al 9.2% de la población nacional.
Se estima que un millón 266 mil 930 son varones y un millón 444 mil 842 son mujeres.
Reportes oficiales indican que el 39% de los hogares del país tiene una o más personas adultas mayores y, de este grupo, en el área urbana se ubica el 36.7% de los hogares; y en la rural el 41.7%.
Según estadísticas reportadas por el Programa Nacional contra la Violencia Familiar y Sexual, durante el año 2012 se presentaron 1,725 denuncias de maltrato contra las personas adultas mayores en los Centros Emergencia Mujer (CEM) en el ámbito nacional.
Asimismo, de acuerdo con las estadísticas, el tipo de violencia que más afecta a una persona adulta mayor es en primer lugar el maltrato psicológico (71%) y en segundo lugar el maltrato físico (26%).
 
Fuente: RPP

Maltrato al Adulto Mayor

A medida que los adultos mayores tienden a debilitarse físicamente, son menos capaces de defenderse contra la intimidación y/o defenderse si son atacados. No pueden ver, oír o pensar tan claramente como antes, creando oportunidades para que las personas sin escrúpulos se aprovechen de ellos.
De esta situación nace el maltrato contra los adultos mayores. Es importante tanto para ellos, como para sus seres cercanos, conocer sobre este abuso y no temer ni dudar en denunciarlo a las autoridades por el bien de nuestros adultos mayores y su derecho merecido a disfrutar de una vida cálida, armoniosa y llena de paz.
Conozcamos entonces ahora, sobre el maltrato al adulto mayor, los diferentes tipos de maltrato:
1.       El abuso físico: El abuso físico al adulto mayor es el uso no-accidental de la fuerza contra éste, que se traduce en dolor físico, lesión o menoscabo. Este abuso incluye no sólo agresiones físicas, como golpes o empujones, sino también el uso inadecuado de medicamentos, las restricciones o el encierro.
2.       El abuso emocional: En el abuso emocional o psicológico, la gente habla o trata a las personas mayores en formas que causan dolor o angustia emocional.
3.       Abuso sexual: El abuso sexual es el contacto con un adulto mayor sin el consentimiento de éste. Este contacto puede implicar actos sexuales físicos, pero las actividades tales como mostrar material pornográfico u obligar a los ancianos a desnudarse también se consideran abuso sexual.
4.       Negligencia o abandono por parte de los cuidadores: Puede ser activa (intencional) o pasiva (no intencional, en base a factores como la ignorancia o la negación).
 
5.       La explotación económica: Esto implica el uso no autorizado de los fondos o bienes de una persona mayor, ya sea por un cuidador o un estafador externo.

Detecte las señales
Las siguientes son señales de advertencia de algún tipo de abuso:
·         Discusiones frecuentes o tensión entre el cuidador y el adulto mayor
·         Cambios en la personalidad o comportamiento en el adulto mayor
Muchos temen represalias del abusador, mientras que otros creen que si denuncian a sus agresores, nadie va a cuidar de ellos. Cuando los cuidadores son sus hijos, pueden estar avergonzados de que sus hijos se comporten de forma abusiva, se culpan a sí mismos, o simplemente no quieren que sus hijos tengan problemas con la ley.

Mitos y verdades sobre la pérdida de memoria en la vejez

Contrario a la percepción que existe respecto a que todos los aspectos de la memoria sufren estragos durante el proceso de envejecimiento, existe evidencia científica que indica que la única memoria que se ve afectada es la episódica, o sea, la que guarda los recuerdos de eventos o episodios sobre experiencias personales. Otros tipos de memorias continúan intactas o incluso, muestran cierta mejoría.
Además de la memoria episódica, contamos también con la semántica y la procesal o de procedimientos. La memoria semántica abarca información general como idiomas, objetos, lugares, normas sociales, relaciones, hechos y conceptos, entre otros. La de procedimientos es la que nos permite usar destrezas motoras sensoriales como montar en bicicleta y tocar el piano, o aprender y memorizar procedimientos, secuencias y reglas para resolver tareas y rompecabezas y el uso de rapidez y exactitud al identificar una palabra o una figura.
“Cuando las personas de edad mediana o avanzada discuten su estado de salud y bienestar, una de las preocupaciones que más mencionan es la relacionada con los problemas de memoria, inclusive el temor a padecer de la enfermedad de Alzheimer”, señala la profesora Beth A. Ober, del Departamento de Desarrollo Humano y Comunitario de la Universidad de California en Davis, en un artículo titulado Memory, brain and aging: The good, the bad and the promising” (Memoria, el cerebro y el envejecimiento: lo bueno, lo malo y lo prometedor), publicado en la revista científica California Agriculture de la UC.
En este artículo, Ober menciona que aún persisten varios mitos sobre la pérdida de la memoria durante el proceso de envejecimiento.
Uno de ellos es que la habilidad de la memoria se reduce en las personas de edad avanzada a tal punto que afecta de manera significativa sus funciones diarias. La verdad es que un 85 por ciento de los adultos de 65 años o más no muestran una pérdida significativa de la memoria y pueden vivir de manera independiente.
Otro mito es que la enfermedad de Alzheimer es algo inevitable en la vejez. La realidad es que esta enfermedad, que conforma un 50 por ciento de todos los casos de demencia, ocurre sólo en un 0.9 por ciento de las personas de 65 años, en un 4.2 por ciento de las de 75 y en un 14.7 por ciento de las de 85 años de edad.
El siguiente mito, que Ober menciona en su artículo, es que cuando los problemas de memoria ocurren durante el proceso normal de envejecimiento incluyen todos los tipos de memoria. Lo cierto es que sólo un tipo de memoria a largo plazo, conocida como episódica o memoria de eventos, sufre un deterioro significativo durante el envejecimiento normal.
De acuerdo con Ober, los científicos han podido documentar el deterioro de la memoria episódica en los adultos de edad avanzada mediante pruebas de laboratorio. A las personas se les somete a pruebas de reconocimiento en la que tienen que responder si cierto objeto estaba o no incluido en una lista presentada previamente. Los adultos mayores de edad mostraron poco o ningún déficit de memoria en reconocimiento, pero en contraste mostraron un gran déficit en la habilidad de recordar.
 

7 consejos para mantener activa la memoria

Según indica el director del Centro Neurológico de Tratamiento y Rehabilitación de Buenos Aires-Argentina, Conrado Estol, “A partir de los 50 años ocurre un deterioro leve de la memoria y otras funciones cognitivas como el lenguaje, el sentido de la orientación y la función ejecutiva, que se ubica en el lóbulo frontal y permite planificar el día y tomar decisiones básicas”.
De acuerdo a referencias científicas citadas en Geosalud, estudios comprueban que hacer ejercicio ayuda a los adultos mayores a realizar sus labores diarias con mayor facilidad, disminuye sus probabilidades de sufrir enfermedades crónicas y, además, baja la tasa de mortalidad. (Heath, 1994). Así también mejora su calidad de vida. (Barry y Eathorne, 1994; Larson & Bruce, 1987; Vandervoort, 1992).
Según señala Dawe y Curran-Smith (1994), Blair y otros (Bouchard, 1990), el ejercicio también beneficia la salud mental de los adultos mayores, además del autoestima, los hábitos de sueño y las relaciones sociales.
Asimismo, este sitio de salud añade que -basado en una “revisión de proyectos realizada por el Departamento de Psicología de la Universidad Nacional de Australia- se demostró que el ejercicio es un antidepresivo, un anti-estrés y mejora los estados de ánimo de las personas que participan en un programa de entrenamiento”.
Si tienes a un adulto mayor en casa, o muy cerca, aquí hay algunos útiles consejos y ejercicios para mantener activa su memoria.
1.- Crucigramas: intenta que en lo posible los realice, pues estar bajo un poco de estrés es un buen estímulo al cerebro.
2.- Película o novela: Pídele que vea una película o el capítulo de una teleserie, y que te explique de qué trataba, intentando que sea en orden cronológico y con los mayores datos y detalles posibles.
3.- Cuentas mentales: Otro ejercicio que contribuye a ejercitar la memoria es sacar cálculos matemáticos mentalmente de las compras del supermercado, comparando posteriormente el total de la boleta.
4.- Cepillado de dientes: Si frecuentemente lava sus dientes con la mano dominante, haz que lo haga con la contraria.
5.- Cambio de ruta: Si cada vez que sale realiza el mismo recorrido, ínstalo a que ocupe otras rutas, para que sepa que existe más de una opción para llegar a casa o al lugar de destino.
6.- Llamadas telefónicas: Solicítale que haga el ejercicio de intentar reconocer a cada persona que llame a la casa, realizando al final del día un listado con todas las personas con las que habló.
Además, para tener buenos resultados a esto se le debe sumar un estilo de vida sano, incluyendo actividad física, evitando situaciones de gran estrés y manteniendo activas las relaciones interpersonales.